17 de mayo
Jueves VI de Pascua
Jn 16, 16-20 Vuestra tristeza se convertirá en alegría
Tristeza de no verte, de perderte, de sentirse abandonado por ti. Tristeza por la finitud, por la limitación, por la debilidad. Tristeza ante la muerte, que cierne el horizonte de la vida, y la estrecha. Tanta tristeza se convierte en gozo, en alegría plena y duradera, cuando salgo de mis estrecheces mentales y me abro ala realidad incomprensible de tu resurrección. Auméntame la fe.
Cuando me abandono en tus Manos, cuando te dejo actuar, cuando no me quejo, me devuelves la calma y la alegría, todo lo veo bajo otro color. ¡¡Gracias Señor, por aguantar mis errores y caídas, siempre me tiendes tu Mano!!