14 de junio
XI Domingo
Mc 4, 26-34 Sin que él sepa cómo
Así es, real, real. Sin que sepa cómo, en cuarto creciente, con un cielo lleno de estrellas, mientras canta el ruiseñor y con su canto todo lo llena, o en el más absoluto de los silencios, a oscuras, en lo profundo de la tierra, la semilla germina y va creciendo, la semilla va produciendo la cosecha ella sola, sin que yo, que duermo de noche y me levante de mañana, sepa cómo sucede. Y sucede. Por tu misericordia.
Corta la raíz de mis afectos
y como si fuese una pavesa
¡muéveme!