Sin perdón

28 de junio
Lunes XIII

Am 2, 6-10.13-16  No lo perdonaré porque venden al inocente…

Todo  un catálogo de despropósitos los que  el profeta Amos ve en el pueblo de Israel y denuncia: Dios no los perdonará. El pueblo ha cerrado su ser a Dios, a endurecido su corazón, ha trivializado su ser y el ser del prójimo. Cuando no hay Dios, ¿quién da valor al ser humano? Si todo es relativo, ¿por qué la vida tiene que ser absoluta? Preguntas de todo tiempo, de nuestro hoy, Señor. La respuesta es arraigarme más en ti, y desde tu ser buscar palabras.

Te seguiré

27 de junio
Domingo XIII

Lc 9, 51-62 Señor, te seguiré a donde quiera que vayas

Señor, te seguiré a donde quiera que vayas. Sabiendo que las zorras tienen madriguera y los pájaros nido, pero que tú no tienes un sitio donde reclinar la cabeza. Señor, te seguiré en la pobreza, te seguiré en el despojamiento,  te seguiré sin desear otra cosas que seguirte. No me importa dónde, ni cómo, ni cuando, pero junto a ti, por el camino que tú me muestres. Haz real mi deseo.

El centurión

26 de junio
Sábado XII

Mt 8, 5-17 No he encontrado a nadie de tanta fe

Este es el elogio de Jesús a la fe de un gentil, de uno que no pertenece al pueblo escogido por Dios, de uno que no conoce la religión del mismo Jesús. Sin embargo tiene una fe que brota naturalmente, que le hace confiar en Jesús sin reservas, que está a la espera, a la expectativa, sin duda, con…una fe así, una fe como la del centurión, es lo que te pido, Señor.

Si quieres puedes limpiarme

25 de junio
Viernes XII

Mt 8, 1-4 Si quieres puedes limpiarme

Ya te lo he dicho muchas veces en la oración y estoy convencido de que tú, Señor, me estás limpiando a tu manera, en la profundidad de mi ser, donde purificas el corazón y las intenciones. Mucho hay que limpiar, muchas parálisis hay que sanar…pero en ti, confío. En el interior tengo la certeza de tu voz: quiero, queda limpio.

Juan Bautista

24 de junio
Nacimiento de San Juan Bautista

Is 49, 1-6 Te hago luz de las naciones…

…para que mi salvación alcance hasta el confín de la tierra. Nos regalas esta frase de tu Palabra, Señor, frase que claramente se aplica a ti, y que de alguna manera, precursora, se aplica a Juan, el más grande nacido de mujer. Juan que te proclama ya próximo, Juan que llama a la conversión, Juan que anuncia con su vida y su muerte la centralidad de tu ser en su ser profeta. Gracias por Juan , Señor.

Frutos

23 de junio
Miércoles XII
Mt 7, 15-20 Por sus frutos los conoceréis

En primavera hay veces que no acierto, en mi ignorancia, a distinguir los frutales: si son manzanos, perales, albaricoqueros, melocotoneros, guindos…Basta tener paciencia y esperar que avance el tiempo que se vaya perfilando el verano. El fruto muestra lo que el árbol es, lo permite conocer. Así, te una manera tan sencilla, nos hablas, Señor, de nuestra vida y de nuestras obras.

Trato

22 de junio
Martes XII

Mt 7,12-14 Tratad a los demás como queréis que ellos os traten

Nos das un consejo, Señor, de sentido común. Un consejo que se convierte en la regla de oro de la moral. Un consejo que debería ser sencillo de cumplir. Y sin embargo qué imposible resulta a veces, más sin la ayuda de tu gracia. Si quiero ser amago, quiero amar. Si quiero ser escuchado, escuchar; acogido, acoger…y así ir conjugando todos los verbos que constituyen el entramado de una vida feliz.

La mota

21 de junio
Lunes XII

Mt 7, 1-5 ¿Por qué te fijas en la mota que tiene tu hermano?

Porque soy mezquino, Señor, porque a veces siento envidia, o celos, porque me siento inseguro, porque no se cómo descargar la agresividad que me domina, por mi soberbia, por considerarme siempre el mejor, por…hay tantos motivos por los que me aparto de mirar con tu mirada de misericordia…Purifícame, Señor.

Vestido de Cristo

20 de junio
Domingo XII
Ga 3, 26-29 Os habéis revestido de Cristo

Vestidos los dejó de su hermosura…así, Señor, nos has revestido de tu misma persona, de tu luz, de tu bondad, de tu blancura, de tu santidad, en el momento del bautismo. Nos has ceñido con tu amor. Nos has regalado un traje de gloria y majestad. De humildad y de cruz. Vestido por ti. Gracias.

Agobio

19 de junio
Sábado XI

Mt 6, 24-34 ¿Quién de vosotros, a fuerza de agobiarse…

…puede añadir una hora más al tiempo de su vida? Ni un a hora ni un minuto, y sin embargo, Señor, cuánto agobio inútil en la vida, cuanto estrés, cuánta preocupación vana, cuánta energía mental y afectiva, emocional y sensitiva gastada en viento y polvo. ¿Dónde está el origen de mi agobio? ¿En qué pliegue recóndito de mi yo? ¡Sálvame de mí mismo, Señor!