Buen Pastor I

15 de mayo
IV domingo de pascua

Jn10, 1-10 Quien entre por mí se salvará

Tú, Señor, el buen pastor; tú la puerta por la que entramos para en el lugar donde está la vida y el descanso; tú la puerta por la que salimos a los pastos, a las verdes praderas que nos alimentan, tú, Señor, conociéndome por mi nombre, tocándome con tu cayado, que me sosiega. Tú Señor, buen pastor, que conduce y me da la vida, la vida abundante.

Guardar

14 de mayo
San Matías
Jn 15, 9-17  Si guardáis mis mandamientos,

permaneceréis en mi amor; lo mismo que yo he guardado los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor. Os he hablado de esto para que mi alegría esté en vosotros, y vuestra alegría llegue a plenitud. Este es mi mandamiento: que os améis unos a otros como yo os he amado. Nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus amigos. Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando. Ya no os llamo siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor: a vosotros os llamo amigos, porque todo lo que he oído a mi Padre os lo he dado a conocer. No sois vosotros los que me habéis elegido, soy yo quien os he elegido y os he destinado para que vayáis y deis fruto, y vuestro fruto dure.
De modo que lo que pidáis al Padre en mi nombre os lo dé.
Esto os mando: que os améis unos a otros.

Palabra del Señor. Que llega hoy a mí. Y me alimenta.

Virgen de Fátima

13 de mayo
Nuestra Señorea de Fátima
Salmo 116 Firme es su misericordia con nosotros

Tu misericordia, Señor, y tu fidelidad duran por siempre, y nos llegan, de generación en generación, a través de las entrañas de María. Tú, rico en misericordia, te haces carne y nos abres el camino de la encarnación. Como maría, llamados a darte en la fe una multitud de hijos, revestidos de tu misericordia, de tu ternura, de tu perdón. Con María, por María, agradecidos.

Pan de vida V

12 de mayo
Jueves III pascua
Jn 6, 44-51 Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo

Esta es la realidad, Señor. Tú el pan de vida que te has hecho carne para salvarnos, para alimentarnos, para darnos la vida. Esta semana pones ante mis ojos esta realidad, eucarística. Y en la eucaristía me hago consciente de tu don, de tu llamada, de la vocación a unirme a ti siendo pan partido para mis hermanos. Que tu gracia me ayude a responderte sin reservas.

 

Pan de vida IV

11 de mayo
Miércoles III pascua

Jn 6, 35-40 El que viene a mí no pasará hambre…

Voy a ti, Señor. Y se que no paso hambre, pues tú me alimentas, me llenas del dulce fruto de tu amor, escancias para mi las delicias de tu corazón, me dejas beber del cáliz de tus delicias. En un mundo con tanta hambre material, con tanta sed de justicia, tú llegas, Señor, y nos anuncias la buena noticia: el que viene a mi no pasará ya hambre, quien cree en mi nunca pasará sed. Así es.

Pan de vida III

10 de mayo
Martes III pascua
San Juan de Avila

Jn 6, 30-35 Yo soy el pan de vida

Tú eres el pan de vida, Señor. Alimentas, nutres, das fuerza, vivificas, llenas, sacias, colmas, satisfaces…a todo el que se acerca a Ti y recibe de ti el pan de vida y el cáliz de salvación. Tú eres el pan de vida, Señor, gracias por alimentarme cada día, por hacerme ser en ti, en tu ser que se dona para que me done a ti.

Pan de vida II

9 de mayo
Lunes III pascua
Jn 6, 22-29 Trabajad por el alimento que perdura para la vida eterna
Cuantos trabajos, cuántos sudores, cuántas preocupaciones, cuántas tensiones, cuantas historias llenan nuestro corazón y embotan nuestra mente y nos separan de ti. Todo sería más fácil si creyéramos, de verdad, que tenemos que trabajar por tu Reino, por el alimento que perdura para la vida eterna. Quizá una buena manera de empezar a plantearlo es preguntarme: ¿cuál es este alimento que no tienen fecha de caducidad?

Pan de vida I

8 de mayo
Domingo III Pascua
Lc 24, 11-35 ¿No ardía nuestro corazón mientras nos hablaba?

Arde de gozo nuestro corazón, Señor, mientras vas por el camino con nosotros, aunque no te sepamos reconocer, aunque nuestros ojos estén ciegos para verte acompañándonos en todas la vicisitudes de nuestra vida. Arde nuestro corazón, y salta de gozo nuestro ser, y se alegran nuestras entrañas, pues tú estás, nos hablas, nos aclaras la historia de salvación. ¡Quédate junto a nosotros, pues cae la tarde y queremos reconocerte al partir el pan!

 

No temáis

Sábado II de pascua

Jn 6, 16-21 Soy yo, no temáis

¿Cómo temer tu presencia alentadora? ¿Cómo temer tu aparición, que siempre sorprende y admira? ¿Por qué asustarse cuando lo que vienes a traer es la vida y la plenitud de amor que nos ofreces? Y sin embargo, como tantas veces, como desde el tiempo de los apóstoles, duda, temor, confusión…Auméntanos la fe, Señor.

Luz y salvación

6 de mayo
Viernes II de pascua

Salmo 26 El señor es mi luz y mi salvación
El Señor es la defensa de mi vida; eso buscaré, habitar en la casa del Señor, gozar de la dulzura del Señor; espera en el Señor; ten ánimo, espera en el Señor. Son todas frases del salmo 26 que me brindan, Señor, la posibilidad de rumiar una de ellas a lo largo del día, para gozar de la dicha que me ofreces esta pascua.