1 de noviembre
Todos los santos
I Jn 3, 1-3 Seremos semejantes a él, porque le veremos tal cual es
Luz de luz, Dios verdadero de Dios verdadero, tu el ser, todo bondad, toda belleza, plenitud, dulzura, fuente sabrosa, collar de paloma, al contemplarte como tú eres seremos para siempre semejantes a ti y cantaremos eternamente tus alabanzas con todos los santos. Nos has llamado para ser en ti santos e irreprochables por el amor. Gracias porque nos llamas a recobrar la santidad primera, la que procede de ti, sin la que seré estimado en nada.
¿Quiénes son y de dónde han venido aquellos que me precedieron?
si ya no están ¿quién me mostrará tu rostro?
¿Quiénes son y a dónde se fueron los que te amaron?
si nos los veo ¿por qué su pasado me lleva al futuro?
Llegará el día en que los santos ocuparán el lugar de los vivos
Estamos llamados a ser santos. A contemplar el rostro de Dios para toda la eternidad. A llenarnos de su Amor para siempre. El mismo Jesús nos llama a ser felices para llegar a su Reino. Felices los pobres de espíritu, felices los que lloran, felices los misericordiosos. felices los que trabajan por la paz, felices los que tienen hambre y sed de justicia, felices los que siguen sus caminos, felices….
Hoy recordamos a todos nuestros intercesores en el cielo para que ellos nos ayuden a llegar a Él.
Ya se alargan las sombras de mi tarde,advierto ya como mi luz declina.Yo creo en ti ,Señor,y se y espero que mi ocaso amanezca en tu han día.