Fijos los ojos

5 de febrero
Martes IV

Hb 12, 1-4 Fijos los ojos

Fijos los ojos en ti, dulce esposo y redención, en ti, Cristo amado, que me has llamado, escogido, mantenido, sostenido, perdonado, salvado. Fijos lo ojos de mi mente y de mi corazón en ti, que inicias y completas la fe, en ti, alga y omega, fortaleza de mi gozo. Que la mirada no se canse nunca de contemplarte, ni de centrar mi vida en ti.

Autor: Nano SM

Religioso Marianista, sacerdote. Actualmente trabajo en la pastoral de un colegio en Madrid, precisamente donde estudié y sentí la llamada a la vocación religiosa. Desde hace tres años escribo cada día un comentario a la Palabra de Dios, que me ayuda a encarnarla y a darla a los demás. De alguna manera participo en la misión de María, dando a Jesús, dando su Palabra.

Un comentario en “Fijos los ojos”

  1. ¡Hijita, levántate!

    No es fácil ver a una persona rota de dolor por la muerte de su hijo y su yerno
    No es fácil buscar palabras o miradas de consuelo
    No es fácil criar nietos estando en la cárcel
    No es fácil confiar en la vida mientras gritas al cielo
    No es fácil gritarle… porque no es fácil verle

    A María Teresa / Soto del Real

    Mc 5, 21-43

Comentarios cerrados.