Corazón puro

25 de febrero
Miércoles I cuaresma

Salmo 50 Oh Dios, crea en mi un corazón puro

Un corazón que se mueva hacia ti como las arenas del desierto, un corazón como la brisa del viento, un corazón que sea rosa no vista, música silenciosa, primera infancia, sol y nube, lluvia, primavera, verano, otoño e invierno, un corazón sin límites anidado en la hendidura de tu corazón. Hazme, Señor, corazón tuyo en el pálpito del mundo.

02.25

Autor: Nano SM

Religioso Marianista, sacerdote. Actualmente trabajo en la pastoral de un colegio en Madrid, precisamente donde estudié y sentí la llamada a la vocación religiosa. Desde hace tres años escribo cada día un comentario a la Palabra de Dios, que me ayuda a encarnarla y a darla a los demás. De alguna manera participo en la misión de María, dando a Jesús, dando su Palabra.

3 opiniones en “Corazón puro”

  1. … un corazón tierno, sin durezas, donde quepa todo el mundo, donde anide el que sufre y descanse el que llora. Un corazón que escuche y se entregue, que abrace y acoja. Un corazón sincero y lleno de luz donde no entre la mentira ni la envidia. Un corazón incapaz de herir al de al lado, de donde no salgan palabras huecas. Un corazón grande donde quepan los amigos y los que no caen tan bien, donde no haya sitio para el rencor, solo para el amor.
    Oh Dios, crea en mi un corazón puro……

  2. ¡Oh Dios, crea en mi un corazón puro!
    Que siempre me mueva el Amor.
    Que esté abierta a recibir con sinceridad al hermano.

Comentarios cerrados.