Confundidos

17 de febrero
Viernes VI

Gn 11,1-9 Por eso se llama Babel, porque confundió el señor la lengua de toda la tierra

Y seguimos con la lengua confundida, Señor, incapaces de entendernos, ni tan siquiera en el lenguaje de la misericordia y la compasión, del amor que procede de ti, sin comprender al otro en su verdad de ser humano, hecho a tu imagen y semejanza. Aún andamos sombríos y dispersos, confundidos, sin saber que todos somos hermanos, hijos tuyos, de la misma humanidad.

Autor: Nano SM

Religioso Marianista, sacerdote. Actualmente trabajo en la pastoral de un colegio en Madrid, precisamente donde estudié y sentí la llamada a la vocación religiosa. Desde hace tres años escribo cada día un comentario a la Palabra de Dios, que me ayuda a encarnarla y a darla a los demás. De alguna manera participo en la misión de María, dando a Jesús, dando su Palabra.