7 de enero
El Bautismo de nuestro Señor
Mc 1, 7-11 Tú eres mi Hijo amado, en ti me complazco
Escucho tu voz, una vez más, decirle al hijo, en quien soy hijo tuyo, que es el amado, el elegido, el que recibe tu espíritu, la luz de las naciones, el defensor de los pobres, el que pasó haciendo el bien y proclamando la buena noticia de tu reino y de tu salvación, rico en misericordia. Me llenas de gozo, desde el bautismo, en el cauce de tu paternidad amorosa.
Hoy un niño pequeñito
alto como el cielo
blandito como el sol
me mira y me sonríe ¡siente mi calor!
Hoy un niño pequeñito habita mi corazón
sueña
ríe
juega
llora
¡cómo si fuera yo!
Epifanía
(con retraso)