18 de diciembre
Viernes III de adviento
Mt 1, 18-24 José, hijo de David, no temas acoger a María
María siempre nos está conduciendo a ti, Jesús, y por eso acoger a tu madre es acogerte la posibilidad de llegar a ti desde su corazón, sus entrañas, su sencillez, su cordialidad, su cercanía, su disponibilidad, su apertura a ti, su acoger tu palabra, su cumplir tu voluntad. María, tu madre.