Vivir

7 de noviembre
Jueves XXXI

Rm 14, 7-12 Si vivimos, vivimos para el Señor

Si morimos, morimos para ti. Así que ya vivamos o y amuramos somos tuyos. Y esa verdad, que creo, sin embargo, tengo dificultad grande para que permanece mi vida, y me haga todo tuyo, solo tuyo y para ti. Y ando tantas veces en otras cosas que no eres tú, que me distraen, que me absorbe, que me separan de ti. Y a ti siempre vuelvo, con el corazón ardiente y afán renovado, porque tú nunca te has ido de mí.