tu gozo

3 de octubre
Jueves XXVI

Neh 8, 1-4ª.5-6.7-12 El gozo en el señor es vuestra fortaleza

Aquel día de lluvia y bruma en Asturias, encajonado en la espesura, laderas verdes, nube del no saber, te mostraste tan inesperadamente y tan real como gozo de mi vida, y desde entonces, y aunque no se bien cómo, ese gozo que me regalas es mi fortaleza. Por eso, más de treinta años después, te bendigo y te doy gracias y canto la alabanza al Dios de mi vida.