Admirable

24 de marzo
III domingo de cuaresma

Ex 3, 1-8.13-15 Voy a acercarme a mirar este espectáculo admirable

Tú, Señor, que ardes sin consumirte delante de mis ojos, que te manifiestas en lo más sencillo y cotidiano, que abres tu cuerpo para mi cada día, y te entregas, que te muestras en los acontecimientos de la vida diaria, en la historia de mi vida, de mi salvación. Tú eres el que eres y serás, y sostienes mi ser. Gracias.