Tu voz

18 de abril
Lunes IV de pascua

Jn 10,1-10 Lo siguen, porque conocen su voz.

Tu voz. Silbo amoroso en mis dulces sueños. Tu voz, frescor resplandeciente, aurora de la mañana, estrella en el desierto, arena cálida, hierba jugosa que me llama: amada mía, paloma mía, hermosa mía, ven a mí. Me levanto en la noche, despierta de días, y te alzo para ti, porque conozco tu voz, y tu voz me guía, me llena de la suavidad de tu hermosura. Tu voz.

04.18