Tesoro V

31 de julio
San Ignacio de Loyola

Jr 18, 1-6 Así estáis vosotros en mis manos

Tomad, Señor, y recibid toda mi libertad, mi memoria, mi entendimiento y toda mi voluntad; todo mi haber y mi poseer. Vos me disteis, a Vos, Señor, lo torno.
Todo es Vuestro: disponed de ello según Vuestra Voluntad. Dadme Vuestro Amor y Gracia, que éstas me bastan. Amén.

07.31

Tesoro IV

30 de julio
Miércoles XVII

Mt 13, 44-46 Tesoro escondido

Jesús, tú eres el tesoro escondido, el bien inestimable y escondido, oculto. No te encuentro cuando busco lo que brilla; no te encuentro cuando no me pierdo de vista, cuando no me escondo en ti para encontrarte escondido en mi. Ni te encuentro ni te busco si no uno mi vida a la paradoja de tu vida, a su misterio. Dame el parecerme a ti, por tu misericordia.

07.30

Tesoro III

29 de junio
Santa Marta

Lc 10, 38-42 Sentada a los pies del Señor, escuchaba su palabra.

La mejor parte en Ti, mi amado. Quédeme y olvídeme, el rostro recliné sobre el amado, ceso todo y déjeme dejando mi cuidado entre las azucenas olvidado. Escondida senda por la que han ido los pocos sabios que en este mundo han sido. La mejor parte. Aquella que nadie le puede arrebatar. La intimidad estrecha, sin saber cómo. a lo que aspiro. El canto de la dulce Filomena.

07.29

Tesoro II

28 de julio
Lunes XVII

Mt 13, 31-35 Se parece a un grano de mostaza

Tú has puesto en mi ser tu grano de mostaza, tu pizca de levadura, la simiente de tu Palabra. Hazme crecer en ti, Señor, abandonado, olvidando que soy arbusto donde anidan los pájaros, masa fermentada de pan tierno, campo que acoge tu don. Haz que viva solo en ti, solo para ti, entregado a mis hermanos.

07.28

Tesoro I

27 de julio
XVII Domingo

Rm 8, 28-30 A los que aman a Dios todo les sirve para el bien

Te amo, Señor, tú eres mi fortaleza, por eso no tiemblo aunque tiemble, por eso el cielo sigue azul, o cubierto, lleno de luz en la noche. Te amo, Señor, y todo es bien en tus manos, tú transformas el desierto en un manantial, sin que bien sepa cómo. Te amo, Señor, por ti vendo todo lo que tengo, por tu tesoro escondido en mi, por tu perla preciosa engarzada en las entrañas de mi ser. No te pido ni vida larga, ni riquezas, ni poder sobre mis adversarios, sino la sabiduría que procede de ti, que me hace ver que a los que te amamos todo sirve para el bien.

07.27

Tus moradas

26 de julio
San Joaquín y santa Ana

Salmo 83 ¡Qué deseables son tus moradas, Señor!

Desgrano el salmo y voy dejando que sus frases sean oración en cada instante de mí día, sembrado por tu palabra, lleno de ti. Mi alma se consume y anhela los atrios del Señor; mi corazón y mi carne retozan por le Dios vivo; dichosos los que viven en tu casa, alabándote siempre; dichosos los que encuentran en ti su fuerza; vale más un día en tus atrios que mil en mi casa.
Dejo que tu Palabra se haga silencio de alabanza en mi.

07.26

Barro

25 de julio
Santiago Apóstol

II Cor 4, 7-15 en vasijas de barro

El tesoro del ministerio lo llevamos en vasijas de barro. para que se vea que una fuerza tan extraordinaria es de Dios y no viene de nosotros. Así es.
Todo es para vuestro bien, Cuantos más reciban la gracia, mayor será el agradecimiento, para gloria de Dios. Así es.
Gracias por recordármelo en esta fiesta de Santiago, el peregrino.

07.25

Fuente

24 de julio
Jueves XVI

Salmo 35 En ti está la fuente viva

En ti está la fuente viva de mis aleluyas, eres la fuente de mis desiertos, donde te seguí de joven, antílope de sabanas entregadas, buscando tus fronteras. Tú me has conducido a un país de huertos, me has dado la granada de tu boca, tu palabra fecunda. Tu misericordia riega mi tierra fértil, la luz de tus estrellas ilumina mis noches, y me hace ver la luz que no conoce el ocaso. Me nutres de lo sabroso de tu casa, me das a beber del torrente de tus delicias. Me concedes el secreto que alegra mi corazón, sin saber bien cómo. ¡Aleluya!

07.24

Cristo

23 de julio
Santa Brígida

Ga 2, 19-20 Vivo de la fe en el Hijo de Dios

que me amó, que me amas, que se entregó por mí. Esta realidad transforma mi vida, me altera en ti, me impregna, me restablece, hace que todo adquiera un nueva dimensión, más allá de lo que se puede explicar. Estoy crucificado con Cristo: vivo yo, pero no soy yo, es Cristo quien vive en mi.

07.23

En la cama

22 de julio
Santa María Magdalena

Cantar 3, 1-4 En la cama, por la noche

En la cama, por la noche, cuando despierto en mis oscuridades y por la ventana no entra, ni tan siquiera, la luz de la luna, me vuelvo a ti, te digo, tú eres mi bien, tú eres el amor de mi alma, te busco y tú me encuentras. La noche sigue siendo noche, el alba no se anticipa, pero tú estás conmigo.

07.22