Luz I

30 de marzo
IV domingo de cuaresma

Ef 5, 8-14 Fruto de la luz

En medio de mis tinieblas, soy fruto de tu luz. Tu luz disipa mis cegueras. Tu luz de pastor me hace pasear entre los naranjales y los abetos, huelo el azahar de tu presencia temprana, el aroma de tu luz, y me haces recostar en tu soledad sonora. Ahí, en el silencio, reparas mis fuerzas. En las cañadas oscuras, tu vara y tu cañada me sosiegan. Fruto de tu luz en la noche, donde juntas amado con amada, amada en el amado transformada.

03.30