20 de mayo
Lunes VII
Ecl 1, 1-10 Toda sabiduría viene del Señor
Así comienza el libro del eclesiástico, así tomamos de nuevo, después de varios meses, el tiempo ordinario: reconociendo que toda sabiduría procede de ti, que no es nuestra, sino puro don. Pidiéndote la sabiduría asistente a tu trono para saber que en la arena de las playas, en las gotas de la lluvia, incontables, en la altura del cielo, en la anchura de la tierra, en la hondura del abismo, de tu abismo, irrastreables, ya estabas tú presente antes de los siglos. Déjamos ver tu presencia entre nosotros haznos sabios, derrámate generosamente sobre nosotros, que te suplicamos sabiduría.