Hijo del carpintero

30 de junio
Viernes XVII

Mt 13, 54-58 ¿No es el hijo del carpintero?

Tenemos embotada la mente para ver lo grande en lo pequeño, lo extraordinario en lo ordinario, lo especial en lo cotidiano, tu presencia salvadora en medio de la urdidumbre del tapiz de nuestra vida. Ahí estás siempre tú, Señor, como tejedor que conoce bien la trama, que sabe que la figura del hijo del carpintero es tu manifestación, llena de amor y salvación.