Que vea

16 de noviembre
Lunes XXXIII
Lc 18, 35-43 Señor, que vea otra vez.

Es la súplica del ciego cuando preguntas, una vez más, ¿qué quieres que haga por ti? Continuamente me estás preguntando y de nuevo te respondo lo mismo: “Señor, que vea otra vez”. Que vea como te he visto, que vea y crea, que no deje de verte y de creer. Que mi mirada me abran a tu realidad y a tu presencia en medio de mi propia historia, de mis hermanos.

 11.16