16 de junio
XI domingo
Gál 2, 6.19-21 Vivo yo, pero no soy yo, es Cristo quien vive en mí
Vivo yo, pero no soy yo, eres tú quien vive en mí, y me vas formando, entretejiendo en lo profundo de mi tierra, cavando en la tumba de mi propio ser para que resucite en Ti, lleno de vida y abundancia. Eres tú, Señor, quien vive en mí y haces que mi ser sea cada vez más tuyo y menos mío, hasta que desaparezca en alabanza de tu gloria. Este es mi deseo. Hacia el que camina mi realidad por la fuerza de tu gracia.
Vivo sin vivirme
si no me desvivo
en tu vida, mi Señor
¡¡Así sea!!