29 de marzo
V domingo de cuaresma
Jn 12, 20-33 Queremos ver a Jesús
Sigue siendo hoy la súplica con la que nos dirigimos al Padre: Ver con los ojos de la fe, ¿con qué si no? Verte, Señor, en la Iglesia, verte en la eucaristía, verte en tu Palabra, verte en los más pobres y necesitados, verte en nuestra historia, verte en nuestras casas, en nuestras plazas, verte impulsando la belleza, la verdad y la unidad en nuestro mundo. Quiero verte, Señor, aumenta mi fe.
Quiero verte, Señor, aumenta mi fe. Me quedo con este final de tu comentario, Nano, para hacerlo jaculatoria.
Quiero verte, Señor, en mi casa, en mi familia, en mis amigos, en los niños con los que trabajo, en el que me encuentro por la calle, en el que me sonrie y en el que llora, en los problemas de cada día y en las alegrías, en los momentos de dolor y de dolores, y en los momentos de felicidad. Porque tú, Señor, estás en todo, estás en mi vida, estás dentro de mi, me conoces y me llamas, quiero verte, escucharte y sentirte para poder caminar y seguir en mis momentos malos y buenos.