Vanos

11 de noviembre
Viernes XXXII

Sab 13, 1-9 Eran naturalmente vanos todos los hombres…

Que ignoraban a Dios y fueron incapaces de conocer al que es, partiendo de las cosas buenas que están a la vista…pues tú eres el autor de la belleza. No quedarme en las cosas en sí, sino ir al principio y fundamento de todo, que está en ti, que de ti recibe la vida. Alejarme de la vanidad y de la confusión tan propicia.  Salir de la ceguera. Abrir los ojos para ver. Para verte.

Autor: Nano SM

Religioso Marianista, sacerdote. Actualmente trabajo en la pastoral de un colegio en Madrid, precisamente donde estudié y sentí la llamada a la vocación religiosa. Desde hace tres años escribo cada día un comentario a la Palabra de Dios, que me ayuda a encarnarla y a darla a los demás. De alguna manera participo en la misión de María, dando a Jesús, dando su Palabra.

2 opiniones en “Vanos”

  1. «Eran naturalmente vanos todos los hombres…»
    Creo que no. Dios nos creó para que lo alabáramos en todo, y sobre todo.
    Para mi Señor ser vana, es no reconocer tu verdadero Rostro, que se refleja en todo ser humano y en todo lo creado. Muchas veces me quedo estaciada, pienso en los regalos tan maravillosos que me das, te puedo contemplar, desde que amanece, hasta durmiendo, en mi descanso sé que sigues junto a mi.¡¡Gracias Señor!!

  2. «¡Tarde te amé, hermosura tan antigua y tan nueva, tarde te amé! y he aquí que tú estabas dentro de mí y yo fuera, y por fuera te buscaba; y deforme como era, me lanzaba sobre estas cosas hermosas que tú creaste. Tú estabas conmigo, pero yo no estaba contigo. Me retenían lejos de ti aquellas cosas que, si no estuvieran en ti, no serían. Llamaste y clamaste, y rompiste mi sordera. Brillaste, resplacediste y se acabó mi ceguera…» (San Agustín, Confesiones, L. X, cap.27)

Comentarios cerrados.