18 de marzo
Miércoles IV de cuaresma
Is 49, 8-15 En tiempo de gracia
En medio de la cuaresma, Señor, te haces adviento inesperado: tiempo de gracia, respuesta, auxilio, defensa, alianza, restauración, luz, tu luz que llama a la luz, invitación salir de mis heredades desoladas y acabar de una vez con lo que no tienen fin, solo en ti caminos de vergel, pastos verdes donde solazarme en tu paz, ni hambre, ni sed, ni bochorno en el desierto. Porque me conduces, Señor de la misericordia, guía de mi vida, tú, el dulce y el compasivo, hacia los manantiales de agua, para saciar mi sed de ti.
Tantas veces te he mirado
y he callado
hasta que viendo, sin ver, en todo te veía