11 de enero
Miércoles I
Mc 1, 29-39 Vámonos a otra parte, para predicar también allí
Llamada incesante, permanente, a la predicación de la Buena Noticia de tu evangelio, Señor. Ir hasta los confines del mundo, ir a los márgenes de nuestra de nuestra sociedad, ir a donde nadie va, ir a los lugares cercanos que están impermeabilizados a tu presencia, ir a los nuevos aerópagos. Ir Señor, a donde tú nos llamas: a otro lugar.
Jesús, no cesa de mandarme a dar a conocer su Reino.
No hace falta ir lejos, vivo en una sociedad que te da la espalda Señor.
Que quiere vivir como si Tú, no existieras. ¡¡Ya vemos los resultados!!
Hay infinidad de injusticias, lo triste es que tampoco hacemos o hago nada, por alzar mi voz contra ellas. Te pido luz, fuerzas y coherencia, para ir donde tú me envíes y ser consecuente.
Retírate a orar, déjate penetrar por el silencio, muévete allí donde la música lo impregna todo, donde la vida alcanza su plenitud.