18 lunes
Lunes XXIV
Lc 7, 1-10 Señor, no soy digno de que entres en mi casa, pero una palabra tuya bastará para sanarme
Todos los días te digo esta frase en la eucaristía, a veces sin darme cuenta. Hoy te la digo de corazón, consciente: Señor, no soy digno de que entres en mi casa, pero una palabra tuya bastará para sanarme. Sáname porque he pecado contra ti.
Autor: Nano SM
Religioso Marianista, sacerdote. Actualmente trabajo en la pastoral de un colegio en Madrid, precisamente donde estudié y sentí la llamada a la vocación religiosa.
Desde hace tres años escribo cada día un comentario a la Palabra de Dios, que me ayuda a encarnarla y a darla a los demás. De alguna manera participo en la misión de María, dando a Jesús, dando su Palabra.
Lee todas las entradas de Nano SM