19 de diciembre
Lc 1, 5-25 En tiempos del Rey Herodes
Entras en nuestro tiempo, en nuestra historia, y conviertes en lugar del mal y de la opresión en tiempo de salvación. También hoy hay Herodes en nuestro mundo, reyezuelos que oprimen la dignidad que has concedido al ser humano. Pasarán y no quedará rastro de su huella. También en nuestro tiempo hay estructuras económicas de pecado, que oprimen al pobre, cuyos gritos llegan hasta ti. Entras en nuestra historia, Señor, en nuestro tiempo, y nos salvas.
„Y el espíritu del Señor comenzó a agitarlo“ así haces con cada uno de nosotros, nos agitas, nos zarandeas, nos despiertas gritando nuestro nombre en medio de la noche. Avisas que vienes, que nunca te fuiste, que siempre estás en nosotros susurrando una palabra.