11 de septiembre
Jueves XXIII
Lc 6, 27-38 Amad a vuestros enemigos
¿Imposible? Eso me pregunto escuchando tu palabra hoy, pensando no tanto en mis enemigos, sino en las personas con las que me cuesta relacionarme. Si tuviera un enemigo, alguien que hiciera peligrar mi vida, mi hacienda, mi honor, mi imagen, ¿le amaría? Si estuviese luchando en un bando, una guerra sin cuartel, como tantas que hay hoy en nuestro mundo, ¿amaría a mi enemigo? Sólo tú, y tu Palabra, tiene capacidad para mostrar lo más real que anida en nuestro corazón.
El amor es fundamental para obtener el perdón de mis errores.
Es verdad que cuesta amar al que te hace la vida imposible, pero hay que hacerlo, e incluso rezar por ellos.
Jesús me dio una gran lección de perdón en la Cruz ¡¡Perdónalos Padre, no saben lo que hacen!! Yo tengo que hacer lo mismo o no seré perdonada.¡¡Cuento con tú ayuda Jesús!!
Zambúllete en el infierno de tu enemigo y verás que no hay nada que no esté en ti, salvo el miedo