2 de noviembre
Conmemoración de todos los fieles difuntos
Lm 3, 17-26 Pero hay algo que traigo a la memoria
Y que en este día de los fieles difuntos es bueno recordar, pensando en los que ya se han ido, pensando en los que seguimos aquí, queriendo seguirte en la Iglesia. Lo que conviene no olvidar, y por eso es bueno recordar, es que la misericordia del Señor no termina y no se acaba su compasión; antes bien, se renueva cada mañana, y así la vida se hace eterna en la abundancia de tu amor, que siempre está dispuesto a resucitar nuestro ser a una nueva vida.
En la catarata de tu luz y eternidad.
Bueno es esperar en el silencio
Actuando
Bueno es esperar en la misericordia
Caminando
Bueno es esperar en el amor
Amando
Ellos, los que me presidieron están siempre en mis oraciones.
¡¡No cayeron en el olvido!! Para mi están intercediendo por nosotros Allí.
Creo en ese Amor tan grade que Dios nos tiene, por ello espero el reencuentro gozoso.