16 de junio
Viernes X
II Cor 4, 7-15 Llevamos el tesoro en vasijas de barro
Tú mejor que nadie sabes de mi fragilidad, de abismo que me cerca, del precipicio de cristales por el que camino, y sin embargo así se ve que tanto don, que una fuerza tan extraordinaria es de Dios y no proviene de nosotros. En mi debilidad me haces fuerte. Todo no conforme a mis méritos, ninguno, sino conforme a tu bondad.
Autor: Nano SM
Religioso Marianista, sacerdote. Actualmente trabajo en la pastoral de un colegio en Madrid, precisamente donde estudié y sentí la llamada a la vocación religiosa.
Desde hace tres años escribo cada día un comentario a la Palabra de Dios, que me ayuda a encarnarla y a darla a los demás. De alguna manera participo en la misión de María, dando a Jesús, dando su Palabra.
Lee todas las entradas de Nano SM