25 de noviembre
Jesucristo, rey del universo
Lc 23, 35-43 Si tú eres rey de los judíos, sálvate a ti mismo
En ti reside toda la plenitud, tú eres el señor del universo, todo fue creado por ti y para ti, tú eres anterior a todo y todo se mantiene en ti…y, ¿precisamente por ello?, tu trono es la cruz, el lugar del suplicio y del fracaso, la paradoja bendita, pues eres el primogénito de entre los muertos y así eres el primero en todo, el que reconcilia todos los seres, a mí incluido, por la sangre de tu cruz. Cristo, un Rey de cruz. Que sigue crucificado hoy en día. Úneme a ti, Señor.
Amigos:
Para rendir homenaje a Cristo Rey, abramos primero nuestro corazón, para permitirle que reine en nosotros, en nuestra vida; esforcémonos en conocerle por medio de la reflexión de la Palabra de Dios, la oración personal y los sacramentos. Son medios eficaces, que nos permiten recibir sus gracias, su misericordia; Gustar de su reinado, la Cruz, la redención el perdón.
El Rey del universo, Cristo: Su reino es el reino del amor, de la misericordia, del perdón… y su trono la cruz, y su corona el dolor, la sangre, el fracaso, la soledad…. Pero luego, el triunfo, la resurrección.
Señor, tú eres el Rey. Venga a nosotros tu reino. Venga a nosotros el AMOR. Ese reino es lo que debemos acercar a los demás.
Tu trono y tu corona también será para nosotros triunfo, nuestro trono y nuestra corona serán el camino para abrazarte. Ayúdanos a reconocer la cruz como el trono de la vida y del triunfo porque después llega la resurrección.