23 de enero
Lunes III
Hb 9, 15.24-28 Cristo
Leer tu nombre y quedarme enganchado en él, esta mañana, mientras la voz de los monjes armenios cantan la divina liturgia. Todo descansa en ti, el genocidio de hace un siglo, la historia del sacerdote que compuso la música que escucho, que te alaba, y quedó mudo, enajenado, tras contemplar la matanza, tan alejada de tu gloria….Cristo, tú eres el Señor del universo, en tu nombre está la Palabra de vida, tú eres todo, todo en ti. Cristo amado, Cristo Señor, Jesucristo de mi locura.
Si estás, él está
pero si te atan, él se quedará solo y nada podrá