Buen Pastor II

18 de marzo
Lunes V de cuaresma

Salmo 22 En verdes praderas me hace recostar

Pastor, tú me despiertas del profundo sueño, de soñar que sueño separado de Ti Pastor que te hiciste cayado en este leño para apacentarme, para que nada me falte, para conducirme hacia fuentes tranquilas, para reparar mis fuerzas. Pastor que me cantas con la flauta del amor hermoso, ríndeme, por el honor de tu nombre, sosiégame de mi mismo. Tú vas conmigo, ¿por qué me temo? Espera pues, Pastor, y escucha mis cuidados, que son requiebros heridos y por Ti sanados.

03.18

Buen Pastor I

17 de marzo
V domingo de cuaresma

Is 43, 16-21 Realizo algo nuevo

Pastor, que por amores mueres, tú me llamas con tus silbos amorosos, me llevas por los caminos del desierto a la novedad de tus ríos en el yermo, donde apagas mi sed de rendirme a Ti. Te haces por amor mi amor y dueño, para que yo me haga en Ti, esclavo de tu amor que me libera. Que mi boca proclame tu alabanza, que me olvide de lo antiguo y entre en la novedad de perderlo todo y ganarlo todo en Ti.

03.17

En silencio

16 de marzo
Sábado IV de cuaresma

Is 11, 18-20 Y comprendí

Hasta de noche me instruyes internamente, en el sueño me das la comprensión profunda del ser y la nada, de la plenitud y el vacío donde mi vida adquiere consistencia liviana en Ti. Crezco y comprendo, disminuyo y me estrello ante el misterio. Tú, Dios, el más grande y el más pequeño; Tú, que creas el universo, cordero manso llevado al matadero, árbol talado en su lozanía. Tanta grandeza para tan poca entendederas. Solo tú abres mi mente, mis entrañas, mi corazón, y haces que comprenda lo incomprensible, deslizándome hacia Ti.

Déjame en silencio.


03.16

Distinto

15 de marzo
Viernes IV de cuaresma

Sb 2, 1.12-22 Lleva una vida distinta a los demás

Así eres, Señor, y así me invitas a ser: distinto a los demás, incómodo, opuesto a las acciones de una cultura que trivializa la vida y se suicida en su propio bienestar, que educa aplaudiendo el yerro, que hace con sus pecados una fiesta de fuegos de artificio que deslumbran fugazmente . Así me invitas a ser, en ti, contracultural en tu sabiduría.

19 Mignard Le Christ Au Roseau Toulouse Musée des Augustins

Cerviz

14 de marzo
Jueves IV de cuaresma

Ex 32, 7-14 Dura cerviz

Y a pesar de la dulzura de tu mano extendida, que me bendice sin cesar desde que sale el sol hasta el ocaso, que aligera mi carga y hace suave y dulce el yugo que ciñe mi vida a lo real, a pesar de tu ternura que es bálsamo en mi fatiga, tengo dura la cerviz, me postro ante el novillo de metal, y adoro el becerro de oro, me cierro ante la carne del hermano que está solo y desamparado, no muero por paliar la injusticia tan manifiesta que infecta el mundo. Perdón, Señor, ten misericordia de mí.

03.14

Luz

13 de marzo
Miércoles IV de cuaresma

Is 49, 8-15 Venid a la luz

Salid, revestíos del cariño eterno que tengo a todas las criaturas, abandonad vuestra carne marchita, las tinieblas que os envuelven en un manto apolillado, venid a la luz que os ofrezco, que deslumbra sin dañar, que deja ciego para que puedas ver y contemplar, cómo nunca antes habías visto, como eres incapaz de soñar, mi clemencia y mi misericordia, la bondad de mis acciones. Ven a la luz, advierte la cercanía en la que pongo tu corazón maltrecho, lo restauro, lo bendigo, y lo llevo a pastar por caminos que aún ignoras.

03.13

Agua

12 de marzo
Martes IV de cuaresma

Ez 47, 1-9, 12 Manaba agua

Zabúlleme en las aguas de tu misericordia, refresca mi cuerpo herido, purifica las llagas de mi pecado, hazme atravesar hacia ti sin temor, sin naufragar en las ataduras de mi carne, llévame a las alturas del abismo hermoso y ciego, hazme descender hasta la muerte oscura, dame el ancla de tu luz, donde se enciende el cirio de la pascua eterna, que me incorporó en el bautismo. Tus aguas caudalosas anegan mi vida, sin que yo sepa cómo.

03.12

Mira

11 de marzo
Lunes IV de cuaresma

Is 65, 17-21 Mirad

Mira, hijo, mira, olvida mirar lo viejo de tu ser, lo caduco de tu vida, ábrete a la creación nueva que estoy realizando en ti, no te atores en el recuerdo del viejo pasado, no tiñas de oscuro los pensamientos al enfrentarte a tu pecado, salta de gozo y alegría perpetua ante lo que voy a crear en ti, donde se renueva la humanidad, todo la creación se abre a mi Espíritu consolador, donde tu carne se hace carne y se entrega por amor a la humanidad.

03.11

Gustad y ved

10 de marzo
IV domingo de cuaresma

Salmo 33 Gustad y ved qué bueno es el Señor

Te doy gracias, Señor, por tanto bien recibido, por tu bondad, por tu lealtad. Todos los poros de mi ser se sacian del sabor de tu hermosura, de tu belleza, de tu bondad, de tu verdad. Tu sabor es nuevo, delicioso, sabroso como los torrentes de manan sin cesar y transparentan las nieves derretidas de las alturas. Todo Tú te haces abrazo de misericordia, aroma de ternero cebado, de fiesta reconciliada. Olvidadas quedan las algarrobas de mi pecado, vuelvo a ti.

03.10

Oración del publicano

03.09

9 de marzo
Sábado III de cuaresma

Lc 18, 9-14 ¡Oh Dios!

Silencioso, con sencillez y humildad, como el publicano en el templo, me dirijo a ti, Señor:
“¡Oh Dios!, ten misericordia de este pecador”.
Y esta frase, que me brinda tu propia palabra, en la experiencia orante de un hombre que postra su ser ante ti, Señor, se convierte en mi rosario de súplica ante Ti, en el día de hoy.
“¡Oh Dios!, ten misericordia de este pecador”.