18 de abril
Viernes IV de Pascua
Jn 14, 1-6 Yo soy el camino, la verdad y la vida
Quiero ponerme ante Ti, Señor, y decirte sin palabras, con todo el sentido que pueda darle, con toda la implicación que pueda ofrecerte, que tú eres el camino, la verdad y la vida de mi vida. Camino que quiero recorrer en ti, contigo; verdad que desvela la realidad de mi existencia y la lleva a plenitud, vida que recibo de ti, tan generosamente, tan llena de bien. Camino, verdad y vida, tú, Señor.
Camino, verdad y vida. Todo eso eres Tú Señor para mí. Tú me lo has dicho y yo así lo creo.
Camino por el que quiero ir hacia ti. Verdad que yo creo, y vida que quiero vivir contigo.
Camino para recorrer la vida y para llegar a la Vida.
Verdad que creo y veo en este tiempo de Pascua cuando te dejas ver resucitado por los que te quieren.
Señor, ayúdame a no salirme del camino, a verte en cada recodo para poder disfrutar del Reino que nos ofreces.
No solo es el Camino, Cristo es el ÚNICO Camino hacia el Padre. «Nadie viene al Padre sino por mí».