Awake

29 de noviembre
Sábado XXXIV

Lc 21, 34-36 Estad siempre despiertos

Despiértame hasta que aprenda a amanecer, Dios mío, en la gran luz de tu misericordia. Despiértame del sueño de vivir separado de ti. Despiértame del cerrarme a mi propia carne en la carne del pobre. Despiértame de mi ego rancio y ebrio de mi. Despiértame en tu fuego en tu mar en tu cielo nuevo en tu tierra nueva. Despiértame de mi muerte por la fuerza de tu resurrección.

11.29

Autor: Nano SM

Religioso Marianista, sacerdote. Actualmente trabajo en la pastoral de un colegio en Madrid, precisamente donde estudié y sentí la llamada a la vocación religiosa. Desde hace tres años escribo cada día un comentario a la Palabra de Dios, que me ayuda a encarnarla y a darla a los demás. De alguna manera participo en la misión de María, dando a Jesús, dando su Palabra.