21 de julio
Domingo XVI
Gn 18, 1-10 Señor, si he alcanzado tu favor
En medio del calor apareces. Se que he alcanzado tu favor, se que no pasas de largo junto a tu siervo, se que te detienes y me haces entrar en tu don, en tu promesa, que sellas conmigo una alianza inquebrantable, que me haces fecundo. Corro a tu encuentro, que vienes a mi, y sabiendo lo que tú me instruyes internamente, aún así, te digo: “Señor, si he alcanzado tu favor, no pases de largo junto a tu siervo”
El Señor conoce lo más profundo de nuestro ser, sabe lo que necesitamos, ahora bien, yo quiero estar preparada para recibirlo, acogerlo y no dejar pasar la oportunidad de hospedarlo en mi casa.
¡¡No pasase de largo junto a mí Señor, te lo ruego!!
Dame quietud en la acción
y acción en la contemplación
Que nada se mueva sino tú