A mi lado

23 de octubre
XXX Domingo

II Tim 4, 6-8.16-18 Mas el Señor estuvo a mi lado y me dio fuerzas

Como siempre, ante ti, certeza inexplicable. Apareces y desapareces, pero siempre estás a mi lado. Cuando me ausento. Cuando creo que te ausentas. Cuando no te siento. Cuando la nostalgia de tus encuentros en plenitud me consumen. Cuando te anhelo, cuando cada día me dirijo a ti para decirte, ten piedad de mi, que soy un pecador. Tú estás a mi lado y me das fuerza para proclamar tu evangelio. ¿Sin ti, qué sería de mi? Pues mi amado es para mi y yo soy para mi amado.

10-23

Autor: Nano SM

Religioso Marianista, sacerdote. Actualmente trabajo en la pastoral de un colegio en Madrid, precisamente donde estudié y sentí la llamada a la vocación religiosa. Desde hace tres años escribo cada día un comentario a la Palabra de Dios, que me ayuda a encarnarla y a darla a los demás. De alguna manera participo en la misión de María, dando a Jesús, dando su Palabra.

3 opiniones en “A mi lado”

  1. Señor, siento tú presencia que me sostiene, me anima y me fortalece.
    ¡Sin Ti, mi vida no tendría ningún sentido! Gracias por el amor que nos tienes, tu gran misericordia y perdón.

  2. A veces, Señor, creemos dominar
    lo más alto del océano
    y con voz y aliento
    para decir y juzgar.

    Mientras, el viento amigo
    que nos ayudó a subir,
    empuja ya nuestro ocaso
    entre la arena y el mar.

    Pero en la plácida orilla
    donde el torbellino acaba
    Tú nos esperas, Señor,
    con paciencia infinita
    con esperanza y amor.

Comentarios cerrados.