Migrantes

30 de diciembre
La sagrada Familia

Mt 2, 13-15.19-23 Levántate, coge al niño y a su madre, y huye

Sigues así, Señor, huyendo en la humanidad desplazada por las guerras, los conflictos, la hambruna, nuestra falta de solidaridad. Una vez más pones delante de mis ojos, junto a mi corazón helado, el sufrimiento de tantos hombres, mujeres y niños, de tantas familias, que lo dejan todo para huir de su país. Sé tú, con nuestras manos, su riqueza y su consuelo. Grita la humanidad herida en su desconsuelo, mientras hago los oídos sordos para cantar la Navidad.