Orar

11 de septiembre
Martes XXIII

Lc 6, 12-19 Subió Jesús a la montaña a orar

Llévame contigo a la montaña, Señor. Introdúceme en tu silencio de amor, en la intimidad gloriosa que tienes con el Padre, en la unión suave y dulce, tan tierna y delicada, con el espíritu, que abrasa, fortalece, rompe y rasga el corazón. Ser orante solo desde tu oración, en silencio, en soledad, en adoración humilde y desaparecida. Ora en mi, sin que yo sepa cómo. Mis noche, en vela contigo. Donde tu eres luz.