Desviado

9 de febrero
Jueves V
I Re 11, 4-13 había desviado su corazón del Señor Dios

¡Qué realidad más constatable en la propia existencia, Señor, la conciencia de desviar el corazón. El corazón que es el órgano de la vida, la fuente del amor sincero, el impulso vital que me mantiene capaz de dirigirme a ti. El corazón desviado, el corazón partido, hecho añicos por el pecado de perder su referencia, su propio ser corazón. Que no es otro que amarte, celebrarte, adorarte, recibir en su cuenca el don de tu amor.