Mira

17 de julio
Sábado XV

Lc 12, 14-21 Mirar a mi siervo, mi elegido, mi amado, mi predilecto

Mirarte, contemplarte, embeberme de tu rostro, dejarme hacer en ti. Saberte  el elegido de Dios Padre, que me eliges. Conocerte amado por Dios, y saberme amado por ti. Escuchar la voz del Padre que te nombra su predilecto, en el bautismo, en la transfiguración, y ensartarme en esa elección de amor predilecto que te hace siervo sufriente, varón de amor y dolor.